sábado, 24 de marzo de 2012

El Día de Iñigo

No, si ya veréis como, a lo tonto a lo tonto, no publico una entrada cuando se supone que debería nunca, ¡jajaja! Esto de llevar las cosas al día no es mi fuerte, no señor. Lo del cunpleaños de mi hermana y lo del día del padre con fotos de archivo fue pura casualidad. Lo normal en mí será que publique fotos de Navidad en agosto y de la playa, en enero. Qué le vamos a hacer, yo soy así... A ver si, al menos, este blog me sirve de terapia para intentar corregir este fallito mío.

Bueno, pues eso, que hoy vengo con las fotos de los regalos del Día de Iñigo, que bien podría llamarse así el Día del Padre...

Os advierto que las fotos de este post son bastante malas. Suelo fallar en momentos importantes como éste. Los cumpleaños, los Reyes, las funciones del cole... No sé por qué, pero no suelo conseguir buenas fotos de esos grandes momentos. Pero como este blog no va de "lo geniales y maravillosas que son las fotos de Cris", sino del día a día de Cris y su familia, pues os las enseño, sin pudor alguno, es lo guay de ser la jefa.

Todo empezó con mucha intriga y cuidadito, para no despertar a papá antes de tiempo...

Papá haciéndose el dormido para la foto :)

"Venga, Pab.blo (Ignacio tiene una forma muy particular de nombrar a su hermano, complicado de reproducir gráficamente), ¡que hay que darle los regalos a papá!"

"Vamos a ello..."

Cuando ya es un hecho que papá se ha despertado, la cosa se acelera, aunque Pablo todavía no entiende muy bien a qué vienen los nervios. Él sigue a su ritmo. 

Si os fijáis, veréis que el regalo de Itashio (así es como Pab.blo llama a su hermano), está ya medio abierto. Es que el viernes, cuando salió del cole con él, se empeñó en que había que darle el regalo a papá YA, y, además, había que dárselo sin papel. Todavía no sé cómo, pero, al final, conseguí contenerlo.

"Paaaaaaapiiiiiiiiiii, que tengo aquí-íííííííí..."

"Yo primeeeeeeeeeeer"


Empezamos con los presentes de Itashio. Primero, un ¿¿¿??? con la huella de su piececito. Todavía no hemos conseguido saber qué es. ¿Un pisapapeles, quizás? No sé... Tiene menos de medio centímetro de grososr y es de plastilina. Como mucho, sujetará un posit...

El orgulloso papá con su flamante regalo.

Y segundo, una tarjeta, coloreada por él por fuera y con una poesía y un retrato cubista por dentro.

"Mira, papá, el retrato tuyo que he hecho. ¿A que es clavadito clavadito?"
"Hay que ver lo bien que escribe mi hijo con sólo tres añitos y medio, ¡y qué bien rima! Debe ser un genio."

 Y ahora el de Pablo, ¡un cuadro para la pared!

Muy bien, Iñigo, hazte el sorprendido, todos sabemos que, a través del papel de celofán, no se ve nada, pero nada de nada, de lo que hay dentro.

"La verdad es que me quedó de cine".

Itashio colgando el cuadro.

¡Y lo que ha mejorado la pared de nuestro dormitorio en un momento!

Luego hubo algún regalito más tipo El Corte Inglés. Es la única forma de que Iñigo tenga ropa nueva, regalándosela. Un polo de manga larga, una camisa, unos vaqueros... Es decir, lo normal en cualquier armario masculino, menos en el suyo, que puede pasar todo el año con los mismos Dockers beige de siempre, y tan pichi.

Ah, os dejo esta otra foto, para mí, llena de ternura. Es de esos momentos que os contaba el otro día, en los que, además de buen padre, me demuestra que es el mejor marido del mundo mundial. Mientras yo dormía la siesta en el sofá, Pablo se despertó de la suya, así que Iñigo, para que yo no me despertara, fue corriendo a por él y se lo llevó a nuestro cuarto, donde pasaron un buen rato viendo Cantajuegos, mientras yo no me enteraba de nada.






viernes, 16 de marzo de 2012

Hoy empieza todo

Por fin me he decidido. Hoy arranca mi blog, nuestro blog, el de Iñigo, Ignacio, Pablo y mío. Porque ya nada es sólo mío, todo viene dividido en cuatro, irremediablemente. Afortunadamente.

Llevaba mucho tiempo queriendo hacer algo así, y, después de darle muchas vueltas, al final lo lanzo, aunque un poco cogido con alfileres, la verdad. El diseño no me convence, la cabecera no tiene ninguna gracia, no sé poner pestañas, me vuelvo loca con las plantillas... Pero ¡no podía esperar más!

Va a ser una especie de diario, o más bien semanario, o quién sabe si anuario... No me apetece ponerme reglas y encorsetarme ya, desde tan pronto. Será como surja, como me apetezca, como nos apetezca. Normalmente, nuestras entradas serán sobre cosas que nos han pasado o hemos hecho recientemente. Pero a mí me encanta volver la vista atrás de vez en cuando. Disfruto muchísimo viendo las fotos de cuando Ignacio empezaba a andar, de Pablito con faldones o incluso de nuestra boda hace más de cuatro años. O sea, que no os sorprenda si de repente veis fotos de un bebé en mis brazos. Por ahora, seguimos siendo cuatro. Por ahora...

En fin, nosotros estaremos encantados de veros por aquí. Si os apetece nos podéis dejar un comentario, sino no. No os preocupéis, aquí no queremos obligaciones ni compromisos ni chorradas, para eso ya hay otros sitios mucho más apropiados.

Por cierto, el título de nuestro blog está inspirado en un libro que leí de pequeña y que recuerdo con tremendo cariño: Mi familia y otros animales, de Gerald Durrell. Un libro altamente recomendable para niños de todas las edades.

Bueno, pues eso, por favor, poneos cómodos y ¡BIENVENIDOS A NUESTRA CASA!


De izquierda a derecha, Ignacio, Iñigo, Pablo y yo (foto de Alfredo Biot)